Álbum 1916 de Mötorhead - Canciones
1916
Reseña
"1916", lanzado en 1991, es uno de los álbumes más aclamados y musicalmente diversos en la discografía de Mötorhead. En este trabajo, la banda se atrevió a experimentar y a moverse más allá de su fórmula habitual, con resultados sorprendentes. Por lo tanto, el disco muestra una madurez y una versatilidad que sorprendió a propios y extraños, y le valió una nominación al Grammy.
El álbum arranca con la energía habitual en temas como "The One to Sing the Blues" o "I'm So Bad (Baby I Don't Care)". Sin embargo, pronto empiezan a aparecer las sorpresas. Por ejemplo, "Love Me Forever" es una poderosa balada con una gran carga emocional. Asimismo, "Angel City" incluye un saxofón, algo impensable hasta entonces.
No obstante, la mayor sorpresa llega al final con la canción que da título al disco, "1916". Se trata de una pieza lenta y solemne, cantada por Lemmy Kilmister únicamente con acompañamiento de teclados y arreglos orquestales. Su letra, una desoladora reflexión sobre la masacre de la Batalla del Somme, es una de las más conmovedoras que jamás escribió. Indudablemente, "1916" es una obra maestra que demostró la profundidad que se escondía tras el ruido.
Listado de canciones del álbum 1916
- The One To Sing The Blues 3:07
- I'm So Bad (Baby I Don't Care) 3:14
- No Voices In The Sky 4:12
- Going To Brazil 2:31
- Nightmare/The Dreamtime 4:40
- Love Me Forever 5:28
- Angel City 3:57
- Make My Day 4:25
- Ramones 1:26
- Shut You Down 2:41
- 1916 3:46
Músicos invitados: James Hoskins (Cello)
"1916", lanzado en 1991, es uno de los álbumes más aclamados y musicalmente diversos en la discografía de Mötorhead. En este trabajo, la banda se atrevió a experimentar y a moverse más allá de su fórmula habitual, con resultados sorprendentes. Por lo tanto, el disco muestra una madurez y una versatilidad que sorprendió a propios y extraños, y le valió una nominación al Grammy.
El álbum arranca con la energía habitual en temas como "The One to Sing the Blues" o "I'm So Bad (Baby I Don't Care)". Sin embargo, pronto empiezan a aparecer las sorpresas. Por ejemplo, "Love Me Forever" es una poderosa balada con una gran carga emocional. Asimismo, "Angel City" incluye un saxofón, algo impensable hasta entonces.
No obstante, la mayor sorpresa llega al final con la canción que da título al disco, "1916". Se trata de una pieza lenta y solemne, cantada por Lemmy Kilmister únicamente con acompañamiento de teclados y arreglos orquestales. Su letra, una desoladora reflexión sobre la masacre de la Batalla del Somme, es una de las más conmovedoras que jamás escribió. Indudablemente, "1916" es una obra maestra que demostró la profundidad que se escondía tras el ruido.
Músicos invitados: James Hoskins (Cello)