Álbum Fleetwood Mac in Chicago de Fleetwood Mac - Canciones

Fleetwood Mac in Chicago

Reseña
La discografía de Fleetwood Mac presenta con este trabajo una inmersión profunda y sin filtros en el corazón del blues eléctrico. Grabado en la legendaria sede de Chess Records, este álbum doble captura a la banda en su estado más puro y reverencial. En consecuencia, el sonido es crudo, directo y absolutamente auténtico, rindiendo homenaje a sus ídolos. Además, la colaboración con leyendas del blues de Chicago como Willie Dixon y Otis Spann no solo legitima su propuesta, sino que también enriquece enormemente el resultado final.
Por lo tanto, las sesiones se sienten como una conversación musical entre maestros y aprendices aventajados. La guitarra de Peter Green, en particular, llora, grita y susurra con una madurez asombrosa, demostrando por qué era considerado uno de los mejores de su generación. De hecho, más que un simple álbum de versiones, es una clase magistral de sentimiento y técnica. Por consiguiente, sigue siendo un documento esencial para entender las raíces de la banda y su profundo amor por el blues. Es, en definitiva, un testimonio sonoro de un peregrinaje musical.
Disco 1
- Watch Out
- Ooh Baby
- South Indiana (Take 1)
- South Indiana (Take 2)
- Last Night
- Red Hot Jam
- Worlds In A Tangle
- Talk With You
- Like It This Way
- Someday Soon Baby
- Hungry Country Girl
Disco 2
- I'm Worried
- I Held My Baby Last Night
- Madison Blues
- I Can't Hold Out
- I Need Your Love
- I Got The Blues
- Black Jack Blues
- Everyday I Have The Blues
- Rockin' Boogie
- Sugar Mama
- Homework
- Drifting
- Fleetwood Mac
La discografía de Fleetwood Mac presenta con este trabajo una inmersión profunda y sin filtros en el corazón del blues eléctrico. Grabado en la legendaria sede de Chess Records, este álbum doble captura a la banda en su estado más puro y reverencial. En consecuencia, el sonido es crudo, directo y absolutamente auténtico, rindiendo homenaje a sus ídolos. Además, la colaboración con leyendas del blues de Chicago como Willie Dixon y Otis Spann no solo legitima su propuesta, sino que también enriquece enormemente el resultado final.
Por lo tanto, las sesiones se sienten como una conversación musical entre maestros y aprendices aventajados. La guitarra de Peter Green, en particular, llora, grita y susurra con una madurez asombrosa, demostrando por qué era considerado uno de los mejores de su generación. De hecho, más que un simple álbum de versiones, es una clase magistral de sentimiento y técnica. Por consiguiente, sigue siendo un documento esencial para entender las raíces de la banda y su profundo amor por el blues. Es, en definitiva, un testimonio sonoro de un peregrinaje musical.