Álbum De T'avoir Aimee... de Charles Aznavour - Canciones

De T'avoir Aimee...

Reseña
Con el álbum De T'avoir Aimee... ("De haberte amado..."), de 1966, Charles Aznavour se sumerge una vez más en las profundidades del amor y, sobre todo, del desamor. Por lo tanto, el disco es una obra predominantemente melancólica y reflexiva, donde el artista explora los recuerdos y las cicatrices que dejan las relaciones pasadas. De hecho, el título mismo ya establece el tono nostálgico que impregna gran parte de las canciones.
La canción que da nombre al álbum es una balada de una belleza exquisita, donde Charles Aznavour canta sobre el legado agridulce de un gran amor. Como resultado, su interpretación es sutil y llena de matices, demostrando que su poder no residía solo en el drama, sino también en la contención emocional.
Además, el resto del disco sigue esta línea introspectiva, con arreglos orquestales que crean una atmósfera íntima y crepuscular. En consecuencia, 'De T'avoir Aimee...' es un trabajo de una gran madurez, la obra de un artista que ya no necesita gritar para expresar el dolor, sino que puede susurrarlo con una eficacia aún mayor. Es, en definitiva, un disco para escuchar en la soledad, una joya de la melancolía.
Listado de canciones del álbum De T'avoir Aimee...
- Et Moi Dans Mon Coin
- Plus Rien
- Je Reviendrai De Loin'
- Pour Essayer De Faire Une Chanson
- Ma Mie
- Les Enfants De La Guerre
- De T'avoir Aimée...
- Que Dieu Me Garde
- Les Bons Moments
- Je L'aimerai Toujours
Con el álbum De T'avoir Aimee... ("De haberte amado..."), de 1966, Charles Aznavour se sumerge una vez más en las profundidades del amor y, sobre todo, del desamor. Por lo tanto, el disco es una obra predominantemente melancólica y reflexiva, donde el artista explora los recuerdos y las cicatrices que dejan las relaciones pasadas. De hecho, el título mismo ya establece el tono nostálgico que impregna gran parte de las canciones.
La canción que da nombre al álbum es una balada de una belleza exquisita, donde Charles Aznavour canta sobre el legado agridulce de un gran amor. Como resultado, su interpretación es sutil y llena de matices, demostrando que su poder no residía solo en el drama, sino también en la contención emocional.
Además, el resto del disco sigue esta línea introspectiva, con arreglos orquestales que crean una atmósfera íntima y crepuscular. En consecuencia, 'De T'avoir Aimee...' es un trabajo de una gran madurez, la obra de un artista que ya no necesita gritar para expresar el dolor, sino que puede susurrarlo con una eficacia aún mayor. Es, en definitiva, un disco para escuchar en la soledad, una joya de la melancolía.