Álbum Fine Line de Harry Styles - Canciones

Fine Line

Reseña
El segundo álbum de estudio del artista británico, una obra que lo consolidó como una de las estrellas del pop más importantes y creíbles del planeta, ocupa un lugar primordial en la discografía de Harry Styles. "Fine Line", lanzado en 2019, es un viaje emocional y sonoro a través de las alegrías y las penas de una relación, un trabajo expansivo y lleno de confianza que se inspira en el pop psicodélico, el folk y el soft-rock de los años 70.
Por esta razón, el álbum se siente como una obra mucho más luminosa y colorida que su debut. Harry Styles abraza sin complejos su amor por la música de Laurel Canyon, creando canciones que son a la vez soleadas y melancólicas. De hecho, el disco narra una historia no lineal, desde la euforia inicial del amor en temas como "Golden" o el exitoso "Watermelon Sugar", hasta la introspección y el desamor en baladas como "Falling".
Además, la producción del álbum es exquisita, llena de detalles y texturas orgánicas. El uso de guitarras acústicas, coros etéreos y arreglos de cuerda crea una atmósfera cálida y envolvente. Sin embargo, el disco también tiene momentos de una energía arrolladora, como en el single principal "Lights Up" o en la épica "She". Consecuentemente, el álbum es un perfecto equilibrio entre la exuberancia pop y la vulnerabilidad del cantautor.
En definitiva, "Fine Line" es un triunfo artístico y comercial. Es el sonido de un artista que se encuentra a sí mismo, un trabajo que no solo fue aclamado por la crítica y nominado a los premios Grammy, sino que también conectó de manera masiva con el público. Por lo tanto, es el álbum que solidificó la imagen de Harry Styles como un icono del pop moderno con un alma clásica.
Listado de canciones del álbum Fine Line
- Golden 3:28
- Watermelon Sugar 2:54
- Adore You 3:27
- Lights Up 2:52
- Cherry 4:19
- Falling 4:00
- To Be So Lonely 3:12
- She 6:02
- Sunflower, Vol. 6 3:41
- Canyon Moon 3:09
- Treat People With Kindness 3:17
- Fine Line 6:17
El segundo álbum de estudio del artista británico, una obra que lo consolidó como una de las estrellas del pop más importantes y creíbles del planeta, ocupa un lugar primordial en la discografía de Harry Styles. "Fine Line", lanzado en 2019, es un viaje emocional y sonoro a través de las alegrías y las penas de una relación, un trabajo expansivo y lleno de confianza que se inspira en el pop psicodélico, el folk y el soft-rock de los años 70.
Por esta razón, el álbum se siente como una obra mucho más luminosa y colorida que su debut. Harry Styles abraza sin complejos su amor por la música de Laurel Canyon, creando canciones que son a la vez soleadas y melancólicas. De hecho, el disco narra una historia no lineal, desde la euforia inicial del amor en temas como "Golden" o el exitoso "Watermelon Sugar", hasta la introspección y el desamor en baladas como "Falling".
Además, la producción del álbum es exquisita, llena de detalles y texturas orgánicas. El uso de guitarras acústicas, coros etéreos y arreglos de cuerda crea una atmósfera cálida y envolvente. Sin embargo, el disco también tiene momentos de una energía arrolladora, como en el single principal "Lights Up" o en la épica "She". Consecuentemente, el álbum es un perfecto equilibrio entre la exuberancia pop y la vulnerabilidad del cantautor.
En definitiva, "Fine Line" es un triunfo artístico y comercial. Es el sonido de un artista que se encuentra a sí mismo, un trabajo que no solo fue aclamado por la crítica y nominado a los premios Grammy, sino que también conectó de manera masiva con el público. Por lo tanto, es el álbum que solidificó la imagen de Harry Styles como un icono del pop moderno con un alma clásica.