Álbum A Tribute to Jack Johnson de Miles Davis - Canciones

A Tribute to Jack Johnson

Reseña
A menudo eclipsado por la monumental "Bitches Brew", "A Tribute to Jack Johnson" (1971) es, para muchos, la incursión más exitosa y directa de Miles Davis en el rock, y una joya escondida en la discografía de Miles Davis. Concebido como la banda sonora de un documental sobre el primer campeón de boxeo de peso pesado afroamericano, el álbum es crudo, agresivo y lleno de energía.
A diferencia de la densidad de su predecesor, aquí la formación es más reducida y el sonido más afilado. La guitarra eléctrica de John McLaughlin es la protagonista absoluta, lanzando riffs potentes y solos incendiarios que recuerdan a Jimi Hendrix. Por su parte, la sección rítmica, con el bajista Michael Henderson, establece un groove de funk-rock implacable.
El álbum consta de dos largas improvisaciones editadas magistralmente por Teo Macero. Miles Davis toca con una ferocidad y una claridad impresionantes, demostrando que podía liderar una banda de rock con la misma autoridad que un quinteto de jazz. Ciertamente, es uno de sus trabajos más potentes y accesibles de la era eléctrica.
Listado de canciones del álbum A Tribute to Jack Johnson
A menudo eclipsado por la monumental "Bitches Brew", "A Tribute to Jack Johnson" (1971) es, para muchos, la incursión más exitosa y directa de Miles Davis en el rock, y una joya escondida en la discografía de Miles Davis. Concebido como la banda sonora de un documental sobre el primer campeón de boxeo de peso pesado afroamericano, el álbum es crudo, agresivo y lleno de energía.
A diferencia de la densidad de su predecesor, aquí la formación es más reducida y el sonido más afilado. La guitarra eléctrica de John McLaughlin es la protagonista absoluta, lanzando riffs potentes y solos incendiarios que recuerdan a Jimi Hendrix. Por su parte, la sección rítmica, con el bajista Michael Henderson, establece un groove de funk-rock implacable.
El álbum consta de dos largas improvisaciones editadas magistralmente por Teo Macero. Miles Davis toca con una ferocidad y una claridad impresionantes, demostrando que podía liderar una banda de rock con la misma autoridad que un quinteto de jazz. Ciertamente, es uno de sus trabajos más potentes y accesibles de la era eléctrica.